Vicus Caprarius - La Ciudad del Agua - (La Città dell’Acqua)

Bajo la Fontana di Trevi en Roma, existe un complejo urbano e hidráulico de la época imperial romana, un tesoro arqueológico descubierto a finales del siglo XX durante obras en la zona. El nombre Vicus Caprarius proviene de la denominación antigua de la calle que pasaba por allí.

Ciudad del Agua bajo la Fontana di Trevi

El conjunto incluye restos de un edificio de viviendas, un castellum aquae (depósito que distribuía el agua del acueducto Aqua Virgo, el mismo que alimenta la Fontana di Trevi), así como pavimentos, mosaicos, muros y objetos de uso cotidiano durante el Imperio Romano.

Importancia del hallazgo de Vicus Caprarius:

-Permite entender cómo era la vida cotidiana en la Roma imperial, especialmente en el barrio donde se encontraba el acueducto.

-El área muestra la estrecha relación entre la distribución de agua y el urbanismo romano.

-El hecho de estar debajo de la actual Trevi, vincula directamente la Fontana moderna con las infraestructuras hidráulicas romanas originales.

Descripción de Vicus Caprarius:

Debajo del incesante murmullo de turistas atraídos por la famosa Fontana di Trevi, Roma guarda un secreto ignorado por muchos, y la estatua del dios grecorromano "Oceanus" parece indicarnos bajo tierra...

Fontana di Trevi

A solo unos pasos de la fuente más bella de Italia, podemos descender a una ciudad sumergida en el tiempo, una joya arqueológica que permaneció oculta durante siglos hasta que un golpe del destino la trajo de vuelta a la luz: el Vicus Caprarius, también conocido como La Ciudad del Agua.

Se accede pagando entrada (4 € sin guía, 8 € con guía), por el n° 25 de la calle Vicolo del Puttarello.

Entrada a la Ciudad del Agua Vicus Caprarius

Este complejo subterráneo se encuentra casi nueve metros por debajo del nivel actual de la calle, y nos permite conocer una parte de la Roma imperial que aún se nos muestra entre muros de ladrillo, canales antiguos y restos de viviendas.

Ciudad del Agua bajo la Fontana di Trevi

Lo que hace especial a este lugar no es solo su antigüedad, sino la forma accidental en que fue descubierto.

Era el año 1985 cuando un empresario italiano llamado Luigi Cremonini compró el antiguo "Cinema Trevi" con la intención de restaurarlo y ponerlo en valor. Pero durante las excavaciones previas a las obras de renovación, algo inesperado comenzó a emerger del suelo... 

Ciudad del Agua bajo la Fontana di Trevi

Bajo capas de cemento, tierra y olvido, comenzaron a aparecer estructuras que no pertenecían al mundo moderno. Era evidente que estaban frente a algo extraordinario: restos de la época imperial, perfectamente conservados.

Vicus Caprarius ánforas

Lo que inicialmente era un proyecto comercial, en 1999 se transformó en una misión arqueológica de alto valor. Un equipo de expertos trabajó con paciencia durante años para desenterrar y estudiar los vestigios que yacían ocultos: cisternas de agua alimentadas por el antiguo acueducto Aqua Virgo (el mismo que aún nutre a la Fontana di Trevi), muros de viviendas romanas, estatuas, monedas, cerámicas y hasta restos de estructuras residenciales con varios niveles.

Vicus Caprarius

Vicus Caprarius objetos del Imperio Romano

Cada hallazgo producido revelaba más y más sobre la cotidiana vida de los romanos hace casi dos mil años. Se deduce que este sector fue una zona residencial de status elevado, ubicada en el "Campo Marzio", cerca del complejo monumental de Agripa.

Entre las piezas más impactantes sobresale un busto de Alejandro Helios, hijo de Marco Antonio y Cleopatra, en excelente estado de conservación y valioso por su rareza.

Tras años de excavación, restauración, y adaptación para recibir público, Vicus Caprarius abrió sus puertas en 2001 como museo subterráneo. Así, quienes se atreven a bajar por sus escaleras, descubren un lugar que parece detenido en el tiempo.

Vicus Caprarius

Pareciera que esas escaleras separan dos dimensiones: la bulliciosa Roma turística de la superficie, y la Antigua Roma silenciosa, misteriosa y eterna que todavía late bajo tierra.

Es uno de los lugares que nos ofrecen una experiencia íntima con la historia. Son estos lugares los que me atraen, como amante del Turismo Histórico y Cultural.

Ciudad del Agua - Vicus Caprarius

Ciudad del Agua - Vicus Caprarius

El aire húmedo por el permanente correr del agua a nuestro lado, las luces tenues, y los pasadizos estrechos, crean un ambiente que parece de película.

Al estar aquí, imaginamos a los antiguos habitantes romanos caminando por estos mismos pasillos, abriendo las mismas puertas, escuchando el mismo fluir del agua que, aún hoy, sigue circulando por canales ocultos y otros a la vista del Vicus Caprarius.

Ciudad del Agua bajo la Fontana di Trevi

Ciudad del Agua bajo la Fontana di Trevi

Roma, "Ciudad Eterna" está llena de maravillas al aire libre, pero su alma más antigua y enigmática suele estar bajo tierra, donde el pasado les susurra a quienes se atreven a buscarlo.

Fontana di Trevi.

No puedo terminar este artículo sin escribir algo sobre la bellísima Fontana di Trevi que se encuentra a unos pasos...

La Fontana di Trevi es uno de los monumentos más célebres de Roma y un símbolo del arte barroco. Su construcción comenzó en 1732, cuando el papa Clemente XII encargó el diseño al arquitecto Nicola Salvi, ganador de un concurso público. Tras la muerte de Salvi en 1751, el proyecto fue continuado por Giuseppe Pannini y finalmente inaugurado en 1762 bajo el pontificado de Clemente XIII.

Fontana di Trevi

La fuente se integra con la fachada del Palacio Poli y ofrece un escenario monumental que mezcla arquitectura y escultura. En el centro se alza la figura de "Océano" (Oceanus), titán de la mitología grecorromana que personificaba el río primordial que rodeaba la Tierra. 

A menudo se lo confunde con Neptuno/Poseidón, pero a diferencia de estos, Océano simboliza la fuente eterna de todas las aguas. Lo acompañan tritones, caballos marinos y alegorías de la abundancia y la salubridad, en una composición que exalta la fuerza vital del agua.

El suministro de la fuente proviene del antiguo acueducto "Aqua Virgo" (Acqua Vergine), construido en el año 19 a.C. por Marco Vipsanio Agripa, general de Augusto, cuya agua alimenta también a Vicus Caprarius, la ciudad bajo tierra que vimos antes. 

Según la tradición, una joven virgen habría mostrado a los soldados el manantial que originó el acueducto, de ahí su nombre. Sorprendentemente, este conducto romano sigue en uso y ha alimentado a la Fontana durante más de dos milenios.

Hoy, la Fontana di Trevi es visitada por millones de personas cada año. Más allá de su valor artístico e histórico, conserva un ritual popular: lanzar una moneda de espaldas a la fuente, con la mano derecha sobre el hombro izquierdo, para asegurar el regreso a Roma.

Si le gustó este artículo, déjeme su comentario al pie, y compártalo por su red social preferida. ¡Gracias!